Hoy levanté con ansia mi pena,
Y la lancé tan lejos que...
Quedó rota contra la oquedad del alma mía...
Como el cristal cincelado a fuego de fragua;
Se quedó en mi pecho, fundida.
Aún la sacudo furioso y se niega a caer,
Parece que fuera solo mía... y así es...
Solo mía puede ser.
La quise tanto... tanto la amé…
Que cuando quise darme cuenta...
Fundida a ella... ¡me quedé!
Contra el muro de mi osadía...
Repartí los trozos.
Esperando que la noche,
Me vaciase acaso de sus reproches...
O tal vez del del llanto.
Inútil fue... Ella aún sigue aquí...
Prendida a mi pecho... donde la incrusté.
⃰ ⃰ ⃰
«Cuando dejamos a la pena invadirnos el alma, dejamos que se
apodere de una parte importante de nosotros mismos... luego se queda en
nosotros para siempre, dejándonos apenas un resquicio de felicidad por donde,
fingir que, somos felices»
«LA FELICIDAD ES UN ESTADO MENTAL... DONDE
PARA LOGRAR SER FELICES TENEMOS QUE OLVIDARNOS DE LOS DEMAS,
Y
ASÍ...
¡YO NO QUIERO SER FELIZ!»