Imagen obtenida de Internet
En la selva de mis adentros
siento cómo el crepitar de mis emociones,
persiguen mis sueños y los convierten en lamentos,
solo por
lograr hacer vibrar mis sentimientos
y no saber expresarlos.
Acaricio éste sueño tan profundo
y presiento tal disparidad por pertenecerte plenamente,
que te dibujé un corazón en el cielo, para después escapar cobarde, huyendo hacia la oscuridad.
"Atrás quedaban ya mis sueños...
tan profundos los
escondí y tan lejos los guardé,
que hoy y aun despertando a mis horas ni el
tic, tac,
del corazón me dejaba soñar.
Te busqué... ¡te lo juro! tanto te busqué, que
sin darme ni cuenta, te perdí.
Hoy todo es oscuridad, soledad
o miedo,
dónde la luz de mis ojos, nada en un mar de olas y misterios.
En pleno desespero, grito y aúllo
y se me agarra al pecho,
esa frialdad nauseabunda de los
muertos,
cuando mueres y sobreviven unos pocos recuerdos de ti...
¡Ay, de mí! pienso; ciego, sordo,
sin latidos ni consuelo ¿Qué será ahora de mí?