Y cómo decirte, vida mía,
Lo mucho que te amo,
Lo mucho que te extraño,
Y en el delirio,
En el que, en mis sueños... te reclamo.
¿Sin que "algo" en mis entrañas,
Se rompa y comience a sangrar...?
Tiemblo, solo de pensar que ello,
Te haga daño...
Y te lleve a llorar.
En las horas en que el reloj,
Marca la noche,
Oscura y sombría.
Mi alma,
Comienza el viaje,
De cada anochecer.
¡Para buscarte!
Y siempre regresa...
Triste… Cansada,
Vencida,
¡Y muy sola...!