Me perturban los sonidos,de este genocidio de mi mente.Loco o insumiso,a este amor que desquicia mis sentidos.Te amé hasta perder el juicio,y no obstante..soy errante a este caminodónde mi juicio,he perdido tras de ti.Me arrebatas...con esos labios sabrosos,juguetones y traviesos.Paladeando cada beso,en esta boca que está sedienta...por degustar todos tus besos.Desdichada...la lengua serpentina que,ida de sonido, no puede hablarte,ni alcanzarte... si te has idoen busca ya de estos¡insaciables adentros míos...!Ámame sin perder el tiempo...soy tuyo, y no habrá razónni juicio para esquivar tu cariño.Si mi única evocación,en esta vida es ser soloun fiel reflejo de tus ojosretratados en los míos.¿A qué esperas pues, amor?¡Hazme tuyo!hasta que la razón me vuelva...y descubra que todo lo que soñé...¡jamás alcanzó a ser mio!
Pudiera ser que un beso no sea la vida entera, cierto, sin embargo, somos capaces de pensar que sí y entregar corazón y alma a quien nos lo de. Después, dejémonos llevar y que el tiempo nos abrace con su tic, tac.