Imagen obtenida de Internet
No quería engañarte, tenía que ser claro
para que me olvidaras. No sé si lo logré
pero, tenía que intentarlo.
Fue duro, muy duro, y no, no fue nada fácil
cuando te escuché decirme lo mucho que me amabas,
mientras yo te apremiaba diciéndote
que todo había acabado entre los dos.
Sí quieres que te diga la verdad, me sentí malvado.
No sé cómo logré ser tan cruel y tan frío, pero lo fui.
Tanto que aún hoy me duele al recordarlo,
aún después de haber transcurrido ya diez años,
y negándome a creer que jamás
fue mi intención hacerte daño.