Nada es
suficiente
para
enseñarte y que aprendas
la
lección definitiva...
amar
sobre cenizas,
solo es querer
verlas volar
y
desaparecer empujadas por el viento.
Llévate
sus recuerdos y guárdalos
en un
cofre de cristal,
tan solo
para poder verlos,
sin que
te puedan dañar la vista o el corazón.
Haz de
tu vida una aventura
recubriendo
tus recuerdos
con
cintas de colores...
un día
te servirán
para
saber cual de ellos,
te hizo disfrutar
mucho más.
No te
engañes nunca,
ni
finjas que nunca existieron
y
recuerda... el amor lo es todo...
¡díselo así a tu corazón!