Esta
presión que agita mis sienes,
dolor
quebradizo…
a mi
alma,.. le duele.
Estímulo
de pensamiento febril,
pensándote...
entrando
a tus entrañas en ideas bravas:
jugando a
ser tu único Dios.
Ser que,
galáctico...
otea
desde tu cuerpo,
el
embalaje que vistes, disfrazada de universo.
Me
esfuerzo por devorar cuánto anhelo,
sorbiendo
a pequeños sorbos, tu celo:
embarrancando
mi nave en tus deseos.
Muerdo
con brusca gula tu pecho,
y un
pedazo de mí...
¡te
devora por dentro!