Imagen obtenida de Internet
Me fui sin llorar…
Me fui sin llorar…
deseando acortar el tiempo
y queriendo ocultar mi dolor
dentro de mí, muy adentro.
Lo llevé tan profundo
y enterré dónde jamás nadie
pudiera verlo…
y allá se quedaron, secos y muertos.
La vida pasó con rápidos pasos
y escuché el ulular del tiempo,
llevándolo sobre mi espalda cansada y vieja.
Nada rejuvenece su sentir,
tampoco hará que detenga sus pasos
cansinos y desgastados por el silbar del viento.
Vida sin aplomo, llanto sin tiempo.
Hoy soy para el amor, su desplante
y para la soledad, su amante más tierno.