Imagen obtenida de Internet
Busco con ahínco la verdad en sus besos,
en las caricias que le prodigo a su cuerpo
y en sus entrañas cuando fuerte la penetro.
Pero, me engaño, no es eso lo que yo siento.
Me dejo atrapar en sus sueños,
en sus pechos, en su forma de quererme
o en su mirar lento, cuando me dice,
dame y no puedo dárselo ¡lo lamento!
Me dejo arrastrar al abismo, sin quererlo,
a ciegas, torpemente, suspirando ¡sintiendo!
Mi vida pide besos de amor que no siento,
también abrazos y caricias o besos muy lentos.
Te busco así, vida mía, más no te encuentro.
Soy una nave perdida en la bruma absurda
de mis pensamientos más oscuros y abyectos.