Imagen obtenida de Internet
Vives envuelta en tu mundo de fantasía,
huyendo de una realidad que te duele,
labrándote un porvenir de ilusiones
y queriendo ser amada aunque sea solo por sensaciones.
Te recreas en tus sueños de príncipes azules,
dejándote llevar por esa ilusa sensación de libertad.
Respiras
creyéndote dueña de tus sueños,
aunque sabes que eres esclava indisoluble de tu
verdad.
Tu fantasía crece a la misma velocidad que mueres,
sin
regalos, sin caricias o algún labio amado por besar.
Retrocede a tu niñez, si
quieres y vuelve a empezar.
No obstante eres dueña de tus actos,
aunque no los quieres ni
necesitas,
prefieres seguir con los ojos cerrados,
durmiendo y soñando nada
más.
Bella de sonrisa de purpurina, deja de soñar,
los príncipes azules no existen, vuelve ya a la normalidad.
Eres
tú la única que puede, solo tú y nadie más,