Quisiera gritar, sin miedo, sin
buscar razones, sin excusas
Sin pensar si ofendo u hago daño a
alguien más…
Pero gritar… gritar profundo,
desgarrado por dentro
y con estas ansias que me consumen
cada una de mis fuerzas.
Y no puedo… ella, la mujer que amo,
se debe mantener oculta,
Lejana y esquiva, (sin ella
desearlo) no la puedo defraudar.
Ella, es la estrella que ilumina
cada uno de mis pasos,
La luna que me alumbra y hasta el
sol abrasador que me abrasa.
Y no grito… no debo, aunque mis
deseos son grandes,
Casi tan grandes como el de tenerla
entre mis brazos y… amarla.
Mientras… este grito, se hace
hierro candente, traspasa mis entrañas,
y me está matando…
Pero no, no puedo gritar… que es a ELLA,
(sin gritar su nombre) la mujer que más amo.