Imagen (Gif) obtenida de Internet
Te extraño, mi amor, y mi vida es solo una sombra infame
buscándote
sin parar,
recorriendo el horizonte de mis sueños más negros,
absurdos y perdidos.
Te perdí en el peor momento y te hice y me hice daño.
¿Por qué tuve que creer que mi decisión era lo
mejor para los dos?
Quizás fue esta forma mía de ver la vida
la que lastimara también a tu corazón.
Ya es tarde para volver atrás
y cambiar los hechos, por besos.
Tarde para sanarte las heridas infligidas a tu alma y a tu carne.
Y sigo aquí... mirando al horizonte
sin ver otra cosa que no
sea la nada y extrañándote.
Ya no importa, mi voz... está ronca y quebrada,
de gritar con
furia para mis adentros...
Aunque solo me devuelva silencios.
Silencios y quebrantos dentro
de mis entrañas,
se quiebran y convierten en miríadas de estrellas.
Aunque solo una de ellas... eres tú.
Por ello seguiré gritando
hasta que mi voz consiga ser
escuchada por ti
tras ir en pos de tu estela y sentir
como la recibirás en tus
brazos convirtiéndonos
por fin los dos... ¡en una leyenda!